Las aguas termales son conocidas desde hace miles de años por sus beneficios para la salud y la estética. Los antiguos griegos, egipcios y romanos ya conocían los beneficios de este elemento natural y se construyeron templos y ciudades enteras en torno a las aguas termales.
Tiene diferentes efectos en el cuerpo humano, divididos en 3 biológicos, físicos y químicos, todos actuando al mismo tiempo. Bañarse en aguas termales aumenta la temperatura corporal, lo que mata los gérmenes, incluidos los virus, y también aumenta la presión hidrostática del cuerpo, aumentando así la circulación sanguínea y la oxigenación. Este aumento de la temperatura ayuda a disolver y eliminar las toxinas del cuerpo. Al aumentar la oxigenación, los baños en aguas termales mejoran la nutrición de los tejidos corporales en general, lo que incrementa el metabolismo, estimulando al mismo tiempo las secreciones del tracto digestivo y del hígado, favoreciendo así la digestión. También relajan las tensiones y reducen los dolores musculares.
En Costa Rica hay muchas opciones de aguas termales, en la Fortuna hay distintas opciones, para todos los gustos y presupuestos